Volem un Futur Net: 4.000 personas en la marcha contra la incineradora de Reyval

sábado, 10 de diciembre de 2011

4.000 personas en la marcha contra la incineradora de Reyval

Unas 4.000 personas, según la organización de la protesta, han vuelto a manifestarse este sábado en contra del proyecto de construcción de la incineradora de l’Alcora, que prevé tratar 135.000 toneladas al año de residuos tóxicos y peligrosos y que pondrá en peligro la salud de alrededor de 350.000 personas de la provincia de Castellón.

La marcha formada por miles de personas venidas desde toda la comarca de l’Alcalatén y comarcas vecinas han recorrido en camino de ida y vuelta, los escasos 3 kilómetros que separan el núcleo urbano de las instalaciones de Reyval Ambient S.L., la empresa que pretende construir la incineradora.

La marcha, que a su regreso ha transcurrido por las principales calles de la capital de l’Alcalatén, ha estado encabezada por un numeroso grupo de niños que portaban diferentes pancartas con los lemas 'Quin és el nostre futur?, volem un futur net' y 'No incineració, sí reciclatge, sí a l’educació mediambiental'. Tras ellos se han situado los representantes de todos los grupos políticos municipales detrás de una única pancarta con el eslogan 'No a la incineradora'.

La mayoría de los asistentes llevaban pancartas y camisetas contra la incineradora y, además, muchos de ellos protegían su nariz y boca con una mascarilla, ya que a la protesta contra la incineradora se suman las continuas quejas de los vecinos más próximos contra las emisiones que se vienen produciendo durante los últimos años en torno a la firma. Estas emisiones, acompañadas de fuertes olores, han provocado una numerosa sintomatología entre los vecinos –como irritación en nariz, ojos y garganta, mareos, náuseas y vómitos- y ya se ha dado cuenta de ello a las autoridades sanitarias.

Por todo esto, a la llegada a la empresa se han dejado algunos elementos simbólicos, como flores, escritos o mascarillas con algún mensaje, y se ha leído un manifiesto en el que se ha insistido en que el proyecto debe pararse '¡Porque no tuvimos voz, porque no tuvimos oportunidad de expresar nuestra opinión, porque se nos ocultó, porque estamos en nuestro derecho y porque nos afecta en lo más fundamental que tenemos: la vida y la salud!'.


Fuente: El Mundo



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